N. del E.-
Conocí a Foster Urtecho hacia 1967 - 1968. Cuando una noche se presentó en Radio Unión y solicitó hablar con Oscar Artacho. Recién llegado del Cusco, Foster, muy jóven en quella ocasión, casi salido del colegio, le expresó a Oscar Artacho su deseo de participar en el elenco de periodistas de Pregón Deportivo. Por el parecido de sus apellidos y por la entereza de su personalidad, Oscar Artacho le tomó gran simpatía y lo incluyó en el plantel durante más de treinta años. Desde aquí, a su familia, enterados de su desaparición, le hacemos llegar nuestro más sentido pésame. Sin embargo su voz pastoza y modulada, el acertado y educado vocabulario que utilizó para narrar con pasión cada partido de fútbol que le tocó narrar,no se habrá silenciado en nuestro afectuoso recuerdo de excelente profesional, periodista y caballero.
lunes, 31 de diciembre de 2018
domingo, 2 de diciembre de 2018
BOTAFOGO ENTRENANDO EN EL ESTADIO NACIONAL DE LIMA 1964
Jugadores del Club Botafogo antes iniciar un entrenamiento. En primer plano el portero Manga, más a trás al lado derecho con buzo azul y rayas blancas, el inolvidable Garrincha.
Famoso delantero Amarildo que reemplazó a Pelé en el Mundial de Chile en 1962.
Mítico portero Manga de los clubes Botafogo de Río de Janeiro y Nacional de Montevideo.
Equipo técnico de Botafogo.
Waldir Pereira, Didí, que más tarde dirigiría a la Selección Peruana de Fútbol en el mundial de México 1970.
martes, 3 de abril de 2018
EL MUNDIAL DE
BÁSQUETBOL FEMENINO EN EL PERÚ
7 de agosto
de 1963
Crítica y difícil situación afronta la Federación Peruana de Básquetbol
que preside el dinámico y empeñoso ingeniero Guillermo Toro Lira, al no
concretarse las expectativas cifradas en un cálculo sobre recaudación de
impuestos. Dicha recaudación calculada en el uno por ciento sobre la ventas en
los establecimientos expendedores de comidas y bebidas, no ha reflejado los
veinte o treinta millones de soles al año para el fomento al deporte nacional que
se esperaba. Ese era en realidad el respaldo económico con el que contaba la
Federación Peruana de Básquetbol para atender los gastos del próximo Campeonato
Mundial Femenino que demanda unos treinta millones de soles en organización y,
especialmente, en la construcción de coliseos cerrados en la ciudad de Lima y
en las subsedes de Arequipa, Tacna, Ica y Chiclayo.
Hasta el momento la
recaudación del primer mes no supera el cuarto de millón. Esto hace suponer que
en los próximos doce meses sólo se recaudará aproximadamente entre tres y
cuatro millones, es decir, la décima parte de lo calculado. Por consiguiente,
la situación es bastante dramática para una federación empeñada desde ya en la
realización de tan importante evento del básquet mundial femenino. Otro de los
inconvenientes que sufre la máxima entidad canastera, es la ubicación del
coliseo a construirse en Lima. El Comité Nacional de Deportes que ha venido
prestando toda clase de apoyo, se encuentra también en un problema de acuerdo a
las cifras desalentadoras de la recaudación.
Al respecto, por
ejemplo, aún no se define la ubicación del mencionado coliseo. Primero fue la Plaza
de Toros de Chacra Ríos, después el Campo de Marte, luego los terrenos del
bosque de Mata Mula, donde se encuentra el Club Hípico Peruano… pero lo cierto
es que el tiempo continúa avanzando y que las gestiones no corren al mismo
ritmo. Esta es una situación bastante enojosa para los directivos del básquetbol,
quienes elaboraron y presentaron con la aprobación del decreto sobre el
impuesto, la manera en que se iba a financiar este certamen. Sin embargo, la
realidad no ha respondido con el mismo deseo y anhelo, poniendo un estado de cosas
bastante complicado.
Las construcciones de
cinco coliseos en Lima y provincias, no son cosa de juego. Su millonario costo
más los naturales gastos dedicados a tan magna organización, han complicado la
situación a un extremo tal que no se sabe ciertamente en qué va a parar la cosa….
Y lo que es más serio: el tiempo no permite demora alguna en especial para el
básquetbol peruano comprometido en la organización de este mundial para marzo
del próximo año.
Otro aspecto que también
contribuye a este nerviosismo, es el rumor insistente sobre el cambio de la
dirigencia en el Comité Nacional de Deportes, lo que contribuye a que nadie
quiera pronunciarse en la continuación de estos preparativos si no están
seguros de seguir al frente del máximo organismo deportivo. En verdad, es muy
malo que se haya producido una situación de esta naturaleza que conspira en
contra de los organizadores, quienes han venido trabajando incansable y
acertadamente por el baloncesto peruano.
viernes, 16 de marzo de 2018
MAURO MINA
EDITORIAL
16 DE OCTUBRE
DE 1962
M
|
auro Mina, nuestro gran
campeón tiene mañana en el número uno del Ranking Mundial, el norteamericano
Eddie Cotton, la prueba decisiva a sus aspiraciones de llegar al título mundial
que ostenta otro norteamericano: Harold Johnson. Para nuestro crédito, es la
oportunidad más preciada de llegar a alcanzar la cima de su profesión, de su
deporte, de sus más caros anhelos, no solo para obtener, como lógicamente
aspiran todos los deportistas, aún profesionales, sino para darle al deporte de
su patria el más grande galardón de cuantos en la historia deportiva del Perú hayan
podido obtenerse.
Esta es una ocasión que
Mauro Mina no puede dejar pasar, porque de su resultado depende, no solo su futuro,
sino la justificación de su prestigio en el consenso internacional y el derecho
a un combate por el título mundial. Mina no solo representa en el boxeo peruano
una figura de orgullo para todos, sino que como deportista refleja el grato
ejemplo de la disciplina, la responsabilidad, la decencia y la capacidad humanas,
virtudes muchas veces difíciles de reunir en hombres que logran un sitial de
gran popularidad y jerarquía.
Muchos y valiosos
atributos adornan a nuestro gran campeón, por ello y por sus excepcionales
condiciones de pugilista extraordinariamente dotado, es que la afición y el
pueblo entero han erigido a este auténtico gladiador de ébano como su máximo
ídolo deportivo. Esta será una fecha inolvidable para todos, porque el ídolo
nacional, nuestro gran campeón sudamericano, la más brillante figura del
momento, tendrá frente a sí la prueba más dura de su exitosa carrera dentro de
las doce cuerdas de un ring.
El rival, Eddie Cotton,
es de la misma jerarquía, por ello el compromiso adquiere relieves de categoría
y promete ser sensacional. De allí el inusitado interés, el nerviosismo de los
fanáticos y de todos aquellos que seguimos paso a paso y pendientes a nuestro
gran favorito, estrechamente unidos, como lo hemos sentido siempre a través de
sus espectaculares triunfos.
Por otro lado, no
podemos dejar de expresar los notables pergaminos de excepción del gran adversario
de mañana, cuya condición de primero en la cotización mundial claramente
expresa la seriedad de sus condiciones deportivas. El más serio reto a la calidad
indiscutible de nuestro campeón. Por eso Mauro Mina enfrentará a un auténtico
boxeador, al que solo doblegará imponiendo sus condiciones y atributos. La
lucha será dura, ardua, difícil y de esa demostración de capacidades que ambos expondrán,
saldrá a no dudarlo ese espectáculo incomparable, pleno de calidad y de emoción
que todos esperamos.
Anticipar un pronóstico
es muy difícil porque la calidad de los púgiles no anticipa superioridad
particular en ninguno de ellos. Para unos, Eddie Cotton, es un deportista de
mayores recursos, más experiencia, con técnica excelente y con pegada capaz de
ofrecer un resultado contundente y sorpresivo. Pero a estas cualidades habrá
que oponer las de nuestro campeón, cuyo progreso es evidente en cuanto a
calidad técnica, agregando la capacidad física extraordinaria de un hombre
fuerte y maduro con dos puños cargados de dinamita. Armas contundentes que han
sido y serán, seguramente, las que sirvan para demostrar de una vez por todas
que Mauro Mina está debidamente preparado y capacitado para vencer al mejor,
incluyendo al mismísimo campeón mundial, si la oportunidad se le presentara.
Este servidor
particularmente cree en Mauro. Yo le tengo absoluta fe en sus excepcionales
condiciones y en el extraordinario estado técnico, físico y principalmente
anímico en el que se encuentra. Mina es un pugilista que reúne todas las
condiciones para lograr su objetivo, a pesar de enfrentar al más difícil rival
de su carrera deportiva, el mejor de todos a los que ha vencido, pero son
precisamente estas circunstancias las que me llevan a crear más y a sentirme más
confiado en nuestro campeón.
Sinceramente, si se me
exigiese un pronóstico de este combate, no dudaría en señalar a Mauro Mina como
el vencedor y vencedor concluyente sin lugar a dudas, porque su modalidad y sus
condiciones naturales, exigen un victoria por knock out. Por lo que si esto es así,
su triunfo deberá decidirse entre el tercer y quinto round, pues las
características del rival dificultarían las posibilidades de nuestro campeón
más allá del quinto round.
jueves, 15 de marzo de 2018
24 DE MAYO DE 1964:
LA TRAGEDIA DEL ESTADIO NACIONAL
A continuación una exposición gráfica de los trágicos sucesos que pertenecen al facsímil LOS SUCESOS DEL 24 DE MAYO EN EL ESTADIO NACIONAL, publicado ese mismo año por el Comité Nacional de Desportes. Esta presentación no pronuncia juicios de valor sobre dichos sucesos.Se trata de una mera exposición de lols documentos fotográfcos. Cada quien podrá sacar sus propias conclusiones.
La Tribuna Norte al nicio del partido Perú-Argentina por la clasificación a los Juegos Olímpicos de Tokio 1964.
La Tribuna de Oriente antes del nicio del partido Perú-Argentina por la clasificación a los Juegos Olímpicos de Tokio 1964
La Tribuna Norte al nicio del partido Perú-Argentina por la clasificación a los Juegos Olímpicos de Tokio 1964
Momento crucial. Víctor "Kilo" Lobatón convierte el fatídico tanto.
El juez uruguayo de apellido Pazos, toma la errónea decisión de anular el gol de Lobatón.
Estalla el escándalo y la protesta en las tribunas.
Inghresa al campo un individuo con el apelativo de "Bomba" y pretende agredir al árbitro.
La Policía reduce inmediatamente al agresor.
El irresponsable es rodeado por elementos de la Benemérita Guardia Civil.
Finalmente, este individuo reconocido como el portero de un prostíbulo del Callao, es conducido fuera del campo.
El árbitro decide suspender el juego.
Ingresa un segundo individuo al terreno y es reducido por la policía.
El árbitro, custodiado por la policía abandona el campo ante la protesta del público de la tribuna de occidente.
El público se resiste a abandonar el estadio. Esta es la truna norte dónde en unos instantes más perdarán la vida más de 300 personas.
La Guardia Civil se mantiene a una prudente distancia, mientras en la tribuna norte continúa la protesta.
Breves instántes despues, los primeros espectadores ingresan al campo de juego arrojando objetos contundentes a los custodios.
Un pequeño palco con bancas (utilizado para los encuentros de boxeo) es vandalizado para obtener objetos que lanzar a la policía.
Fatídico momento en el que se lanzan las primeras bombas lacrimógenas a la tribuna norte. La decisión que desatará finalmente la tragedia.
Tribuna norte.
Tribuna norte.
Tribuna norte. Detalle.
Tribuna de oriente.
Tribuna de oriente.
Tribuna de oriente.
Tribuna norte. Detalle. La gente corre hacia las salidas. Las puertas de acceso a la calle estarán cerradas. Una trampa mortal.
tribuna de oriente.
El Estadio Nacional un día cualquiera.
EDITORIAL DEL 23 DE
JULIO DE 1964
DOS MESES DESPUES DE LA
TRAGEDIA DEL ESTADIO NACIONAL (2)
Sin embargo quienes estaban llamados a defender esta posición, han
sucumbido para justificar toda esa injuria por falta de carácter, amor propio y
sobre todo de dignidad. A través de más de doce años, desde que se inauguró el
hermoso Estadio Nacional de Lima como exponente del avance deportivo y cultural
de nuestra capital, han sido innumerables los eventos de carácter internacional
y hasta continental que se han llevado a cabo en sus instalaciones, sin
incidente alguno.
No hace mucho, el más reciente, ha sido el Campeonato Mundial Femenino
de Básquetbol: una demostración palmaria no solo de excelente organización por
parte de la Federación Peruana de Básquetbol, sino una maravillosa ocasión en
la que personalidades de todo el mundo, elogiaron el comportamiento del público
que contribuyó con su cultura y hospitalidad a engrandecer un certamen de tan
singular importancia.
Desgraciadamente a pocos días de dicho campeonato, se produjo esta
catástrofe en el mismo escenario por un incidente que tomó las proporciones ya
conocidas, no por culpa de nuestro público deportivo, sino por circunstancias
bastante ajenas a ello. Lamentablemente, los resultados dejaron un tremendo
dolor a quienes de cerca sufrieron las consecuencias del pánico, como pudo
haber sucedido en cualquier otro escenario del mundo entero.
La exageración en las medidas de seguridad que se están tomando no se
pueden achacar a un público que jamás invadió el campo de juego ni atentó contra
la integridad física de ningún deportista nacional o extranjero. La prueba de
ello es que aquel desventurado día solo ingresaron al campo dos individuos con
pésimos antecedentes y que rápidamente fueron controlados. ¿Se expuso, acaso,
la vida del árbitro? ¿De los jugadores? Todo lo contrario, las mayores garantías
fueron precisamente para ellos.
¿Por qué, entonces, aplicar estas desmesuradas medidas de seguridad que
convierten a nuestro estadio en un campo de concentración alemán? Si algo
necesitaba nuestro primer escenario deportivo era precisamente ampliarlo y no
reducirlo. Nada justifican estas medidas absurdas, las críticas que desde el
extranjero se han vertido en contra del público peruano. Parece ser nuestro
medio el terreno fértil para proceder con estas insólitas actitudes que
pretenden disfrazar o esconder la realidad de los acontecimientos ya hasta
lavarse la manos, cual Pilatos de nuestra historia deportiva.
EDITORIAL DEL 23 DE JULIO DE 1964
DOS MESES DESPUES DE LA TRAGEDIA DEL ESTADIO NACIONAL (1)
Una insólita actitud se ha tomado en exagerado extremo acerca de la
seguridad del Estadio Nacional que, más que construir –como es lo normal- está
destruyendo, no solo las instalaciones de nuestro primer coliseo deportivo,
sino su propio prestigio. Y ya lo dije una vez, cuando se produjeron los
sensibles acontecimientos del 24 de mayo.
Hasta esa fecha, el público peruano había gozado de una gratísima
opinión de dirigentes, deportistas y personalidades del deporte internacional,
al reconocer su imparcialidad y la cordura de la que hacía gala en los
espectáculos que se realizaban en nuestra capital. Sin embargo, todo ello se ha
echado a perder gracias a que aquellos llamados a defender los principios del
la cultura y el orden, vienen tratando de esconder costa de estas medidas, errores
que fueron, indiscutiblemente, los que causaron la catástrofe del Estadio
Nacional.
Es penoso tener que comprobar una vez más, la incapacidad y la ausencia
total del sentido de la responsabilidad y más aún, la falta de valor, de
quienes al frente de los organismos responsables intentan esconder una gran
verdad, escudándose en torpes excusas y razonamientos sin criterio ausentes por
completo de la realidad.
Un hermoso estadio como el Nacional, está siendo destruido por exceso
de seguridades, en un claro atentado contra nuestro público que no merece que
principal coso deportivo sea transformado en un vulgar campo de concentración.
Y es que estas inaceptables medidas por lo ridículas, no hacen sino justificar
plenamente, la información deformada de los hechos que realmente difundió la
prensa extranjera que, sensacionalista y amarillenta, ha pretendido tratar al
público peruano de inculto y salvaje.
miércoles, 14 de marzo de 2018
ALBUM FOTOGRÁFICO FAMILIAR
Con su esposa Josefina y sus hijos. Ca. 1964
En Magdalena Nueva al lado de su señora, su cuñada Leonor de Torres Matos, sus sobrinos y su hija Marcela.
Con su nieto Piero Ferrari Goyburu en el día de su Primera Comunión. Ca. 1986.
Con los Ferrari Goyburu: su hija Marcela, su hijo político Guillermo y sus nietos. Ca. 1987.
Foto familiar en compañía de su esposa Josefina y de sus hijos Marcela y Raúl. Ca. 1954.
FÚTBOL DESCENTRALIZADO 1964 (2)
No exijamos que al dar inicio a esta
nueva etapa, sea esta perfecta, ni pretendamos que todos sean participes desde
un inicio, pues la gestión, a no dudarlo, será bastante dura y ardua.
Contentémonos con que al fin se dé inicio a ella. Los diez clubes profesionales
residente en Lima, serán la base de esta nueva etapa del fútbol rentado y serán
invitados cuatro o seis de los mejores elencos provincianos. Lo importante es
hacer lo que antes no se hizo.
Miguel Grau de Piura, uno de los
mejores clubes provincianos estará presente. Mariano Melgar, campeón
arequipeño, representará al baluarte mistiano que por categoría le corresponde
alternar en esta nueva etapa futbolística. Los Diablos Rojos de Chiclín,
tradicional escuadra del norteño fútbol liberteño, por antecedentes y jerarquía,
será otro de los aportes para esta gran prueba. Y como estos, otros
representativos de sus respectivos terruños podrán contribuir a que la
esperanza se convierta en hermosa realidad.
Una organización bien estructurada y
técnicamente construida podrá responder plenamente a este objetivo. La Federación
ha dado ya el primer paso con el respaldo de toda la afición nacional, porque
la descentralización, que esta vez podrá llamarse así, representará indiscutiblemente,
la iniciativa más acertada y productiva para que por fin abramos las puertas a
un futuro de grandes y gratas revelaciones.
FÚTBOL DESCENTRALIZADO 1964 (1)
Fútbol descentralizado.
Eso es lo que ha necesitado desde hace mucho tiempo el fútbol nacional, sea
amateur o profesional. Pero, fútbol descentralizado en la acepción del vocablo…
no fútbol descuartizado, como el que se hizo el año pasado y se pretendió
llamar descentralizado. La
descentralización en el fútbol es llevar su organización a todos los sectores
del territorio nacional, como se hace en otros países como España, Italia, y
para no ir tan lejos, como se está realizando actualmente en Chile y Colombia.
El progreso del deporte
nacional radica única y exclusivamente en juntar las fuerzas de todos para
lograr una tarea efectiva y mancomunada que dé paso al progreso. El
centralismo, negación de todo avance, ha sido un mal que durante toda la
historia de nuestro deporte hemos padecido y que no le ha permitido alcanzar a
lo largo de su trayectoria, un mejor lugar entre los países sudamericanos.
Actualmente, en pleno
año de 1964, el deporte peruano arrastra un retraso innegable. El fútbol
profesional, actividad por excelencia en nuestro medio, padece de una mohosa
organización sin expectativas ni esperanzas de rehabilitación, principalmente
en el aspecto económico que representa la base fundamental para su adelanto
técnico. La organización y reglamentos que han regido y rigen actualmente a
esta actividad, no han permitido que su propia evolución, acorde a los tiempos
que vivimos, haya encontrado el camino para dar un paso adelante.
Sin embargo, al parecer
la Federación Peruana de Fútbol está dando ese primer paso, aunque retrasado,
pero al fin dado. Una decisión que le hacía falta a nuestro balompié desde hace
muchos años. La descentralización efectiva, cabal, justa. Esa misma que es tan necesaria
para iniciar un progreso de expectativas que sean realmente promisorias. Una
descentralización verdaderamente auténtica, extendida a todos los ámbitos del
país con la valiosa contribución del fútbol provinciano.
martes, 13 de marzo de 2018
EN VÍSPERAS DE LOS
JUEGOS OLÍMPICOS DE TOKIO 1964
El primer contraste del representativo masculino de básquetbol, ha sido
en su gira por Puerto Rico, donde sus tres presentaciones frente al
seleccionado de ese país han significado tres derrotas consecutivas. No vamos a
pretender que nuestro básquetbol masculino haya logrado un nivel para
considerarlo entre los primeros del mundo, no; porque sería demostrar que estamos
muy lejos de la realidad y del conocimiento de la verdad. Sabemos también que
el básquetbol de Puerto Rico sí está considerado entre los primeros del mundo,
pues este deporte en ese país ha alcanzado en los últimos años una superación
de indudable capacidad internacional, tanto que es uno de los favoritos de la
crítica para los primeros cuatro puestos de las próxima olimpiada de Japón.
Pero, al margen de estas competencias, sí debemos hacer mención de algo
que de todas maneras debe haber influido en la actuación del equipo nacional:
la separación del entrenador norteamericano Jim MacGregor. La misma crítica de
Puerto Rico ha resaltado que “al equipo
peruano le falta coordinación de juego y precisión en sus lanzamientos”. Y lamentablemente
esta es la demostración de algo que creíamos ya superado en el basquetbol
peruano. La actuación de este equipo nos está demostrando que algo no funciona
bien en estos momentos y creemos sinceramente que ello pueda influir
notoriamente en la separación sorpresiva del entrenador norteamericano que
durante tres años guió al equipo nacional.
El impacto tiene que haberse reflejado en los jugadores como parece que
ha sucedido en estas tres primeras presentaciones. El equipo ha viajado ya a Canadá,
donde cumplirá con nuevas presentaciones antes de viajar directamente a Tokio,
donde intervendrá en los Juegos Olímpicos. Esperamos que el estado anímico,
principalmente, no influya demasiado en los muchachos y que los primeros
obstáculos y reveses sufridos en estas previas confrontaciones, sea superado
para los partidos más serios y difíciles que tendrá que afrontar en Japón, de
modo que se puedan superar en forma tal que ojalá nos deparen una de esas
sorpresas agradables que borren totalmente los inconvenientes y errores
cometidos en vísperas de esta complicada misión. Esperamos que así sea y lo
deseamos muy sinceramente.
HACIA EL MUNDIAL DE INGLATERRA 1966 (2)
Por Argentina: Manuel
Ferreyra, Juan Botasso, José de la Torre, Fernandeo Paternoster, Juan Evaristo,
Luis Monti, Pedro Suárez, Carlos Peucelle, Francisco Varallo, Guillermo Stabile
y Mario Evaristo. En 1950 por Uruguay: Máspoli, Varela, Tejera, González,
Andrade, Gambetta, Morón, Schiafino, Míguez, Pérez y Ghiggia. Por Brasil
(subcampeón): Barbosa, Da Costa, Juvenal Bauer, Danilo, Bigodex, Friaca,
Zizinho, Ademir, Jair, Chico. En 1958, Brasil en Suecia (campeón): Gilmar,
Djalma Santos, Bellini, Nilton Santos, Zito, Orlando, Garrincha, Duidí, Vavá,
Pelé y Zagalo. En 1962 Brasil en Chile (campeón) Gilmar, D. Santos, Mauro, N.
Santos, Zito, Zózimo, Garrincha, Didí, Vavá, Pelé, Amarildo y Zagalo.
Así amigos, cada semana, los días
martes para mejor información, iré ofreciendo a ustedes, fragmentos de la
historia de los campeonatos mundiales por la Copa Jules Rimet como un gran
homenaje a las más descollantes figuras del fútbol sudamericano en este período
en el que el mundo futbolístico ya se prepara para 1966 y la Copa del Mundo en Inglaterra.
HACIA EL MUNDIAL INGLATERRA 1966 (1)
En vísperas nuevamente del acontecimiento más importante del fútbol mundial, la realización del VIII Campeonato del Mundo por la Copa Jules Rimet que tendrá lugar en Inglaterra, cuna del fútbol (deporte que ha logrado la mayor popularidad en los cinco continentes y que la F.I.F.A., organismo controlador de esta actividad internacionalmente, ya ha dado a conocer cuáles serán las series eliminatorias de este gran evento en las que deberemos alternar frente a Uruguay y Venezuela en mayo y junio del próximo año, en fechas designadas para ello. Y es bueno que al cumplirse este octavo campeonato mundial, hagamos un recuerdo de la historia de los siete torneos ya realizados, pues resultará interesante para el público aficionado recordar o comenzar a conocer cómo desde 1930 se llevaron a efecto esta competencias y cuáles fueron los resultados. En 1929 en la ciudad de Barcelona, España, es decir un año antes de la iniciación de estos torneos mundiales, el congreso de la F.I.F.A. había designado por aclamación a la ciudad de Montevideo, capital de Uruguay, como sede del campeonato, a pesar que en un principio algunos países del viejo mundo se opusieron, aludiendo una serie de razones acerca de la incomodidad del viaje, el clima que finalmente no tuvieron la contundencia para modificar el resultado de este acuerdo. Sin embargo, esta primera competencia mundial se vio afectada por la ausencia de representativos de mayor jerarquía de la época como España, Italia e Inglaterra. A pesar de ello, asistieron otras fuerzas europeas de indiscutible calidad como Yugoslavia, Francia, Bélgica y Rumanía. Así el certamen alcanzó el éxito esperado y señaló el derrotero histórico de lo que vendría después. Clasificados para las finales dos equipos sudamericanos, los más fuertes por esa época, Uruguay y Argentina, disputaron la gran final del I Campeonato del Mundo. El Estadio Centenario de Montevideo superó los ochenta mil asistentes, entre los que se encontraban al menos diez mil argentinos que habían cruzado el Río de la Plata para alentar a sus favoritos que dos años antes en los Juegos Olímpicos de Ámsterdam habían sido vencidos por Uruguay. Si bien el encuentro no alcanzó l brillantez de un clásico como los de aquellos tiempos, la lucha si alcanzó contornos emotivos y hasta dramáticos a lo largo de los noventa minutos de juego. El resultado, nuevamente, fue favorable para el seleccionado uruguayo que dejó un hálito de desaliento entre los parciales argentinos que ansiaban cobrarse la revancha por derrota en Ámsterdam y así clasificarse como primer campeón mundial. Con este resultado los uruguayos reafirmaron su brillante trayectoria y garra que les permitió saber ganar los partidos decisivos. Así no solo repitió la jornada de Ámsterdam sino la Colombes en 1924, demostrando en forma clara y rotunda que Sudamérica se erguía como ya como una de las potencias más sólidas del fútbol mundial, arrebatando el cetro exclusivo que hasta entonces había mantenido el fútbol europeo. En las siete oportunidades en que se han cumplido estos campeonatos mundiales, Uruguay y Brasil han vencido dos veces cada uno. Por el lado europeo Italia lo ha hecho en dos oportunidades y Alemania en una sola. Hasta el momento y en vísperas del Octavo Torneo Mundial, Sudamérica ha superado a Europa al haber obtenido la Copa Jules Rimet en cuatro oportunidades con tres del viejo mundo. Y es bueno recordar, antes de terminar mi primera charla sobre los torneos mundiales, las que continuaré al alcanzando al público aficionado, no solo dando a conocer fechas y resultados sino recordando también a aquellas grandes figuras del fútbol sudamericano que con indudable categoría y calidad conquistaron esta supremacía que se ha mantenido hasta la fecha. Uruguay de 1930 con José Nazari, Enrique Ballesteros, Ernesto Mascheroni, José Andrade, Lorenzo Fernández, Álvaro Gestido, Pablo Dorado, Héctor Scarone, Néstor Castro (el manco), Pedro Cea y Santos URIARTE.
En vísperas nuevamente del acontecimiento más importante del fútbol mundial, la realización del VIII Campeonato del Mundo por la Copa Jules Rimet que tendrá lugar en Inglaterra, cuna del fútbol (deporte que ha logrado la mayor popularidad en los cinco continentes y que la F.I.F.A., organismo controlador de esta actividad internacionalmente, ya ha dado a conocer cuáles serán las series eliminatorias de este gran evento en las que deberemos alternar frente a Uruguay y Venezuela en mayo y junio del próximo año, en fechas designadas para ello. Y es bueno que al cumplirse este octavo campeonato mundial, hagamos un recuerdo de la historia de los siete torneos ya realizados, pues resultará interesante para el público aficionado recordar o comenzar a conocer cómo desde 1930 se llevaron a efecto esta competencias y cuáles fueron los resultados. En 1929 en la ciudad de Barcelona, España, es decir un año antes de la iniciación de estos torneos mundiales, el congreso de la F.I.F.A. había designado por aclamación a la ciudad de Montevideo, capital de Uruguay, como sede del campeonato, a pesar que en un principio algunos países del viejo mundo se opusieron, aludiendo una serie de razones acerca de la incomodidad del viaje, el clima que finalmente no tuvieron la contundencia para modificar el resultado de este acuerdo. Sin embargo, esta primera competencia mundial se vio afectada por la ausencia de representativos de mayor jerarquía de la época como España, Italia e Inglaterra. A pesar de ello, asistieron otras fuerzas europeas de indiscutible calidad como Yugoslavia, Francia, Bélgica y Rumanía. Así el certamen alcanzó el éxito esperado y señaló el derrotero histórico de lo que vendría después. Clasificados para las finales dos equipos sudamericanos, los más fuertes por esa época, Uruguay y Argentina, disputaron la gran final del I Campeonato del Mundo. El Estadio Centenario de Montevideo superó los ochenta mil asistentes, entre los que se encontraban al menos diez mil argentinos que habían cruzado el Río de la Plata para alentar a sus favoritos que dos años antes en los Juegos Olímpicos de Ámsterdam habían sido vencidos por Uruguay. Si bien el encuentro no alcanzó l brillantez de un clásico como los de aquellos tiempos, la lucha si alcanzó contornos emotivos y hasta dramáticos a lo largo de los noventa minutos de juego. El resultado, nuevamente, fue favorable para el seleccionado uruguayo que dejó un hálito de desaliento entre los parciales argentinos que ansiaban cobrarse la revancha por derrota en Ámsterdam y así clasificarse como primer campeón mundial. Con este resultado los uruguayos reafirmaron su brillante trayectoria y garra que les permitió saber ganar los partidos decisivos. Así no solo repitió la jornada de Ámsterdam sino la Colombes en 1924, demostrando en forma clara y rotunda que Sudamérica se erguía como ya como una de las potencias más sólidas del fútbol mundial, arrebatando el cetro exclusivo que hasta entonces había mantenido el fútbol europeo. En las siete oportunidades en que se han cumplido estos campeonatos mundiales, Uruguay y Brasil han vencido dos veces cada uno. Por el lado europeo Italia lo ha hecho en dos oportunidades y Alemania en una sola. Hasta el momento y en vísperas del Octavo Torneo Mundial, Sudamérica ha superado a Europa al haber obtenido la Copa Jules Rimet en cuatro oportunidades con tres del viejo mundo. Y es bueno recordar, antes de terminar mi primera charla sobre los torneos mundiales, las que continuaré al alcanzando al público aficionado, no solo dando a conocer fechas y resultados sino recordando también a aquellas grandes figuras del fútbol sudamericano que con indudable categoría y calidad conquistaron esta supremacía que se ha mantenido hasta la fecha. Uruguay de 1930 con José Nazari, Enrique Ballesteros, Ernesto Mascheroni, José Andrade, Lorenzo Fernández, Álvaro Gestido, Pablo Dorado, Héctor Scarone, Néstor Castro (el manco), Pedro Cea y Santos URIARTE.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)